FARO DE VIGO
La escolta muestra su ambición antes de la visita al Cortegada
Llegó desde Venezuela para abrirse hueco en Europa y, por el momento, lo está consiguiendo. Waleska Pérez es la sensación de la Liga Femenina 2. La escolta venezolana destaca en todas las estadísticas del juego y lidera la de robos. Su agresividad y su talento contagian a un Arxil que pasa por un gran momento antes de afrontar la visita al Cortegada. El duelo provincial servirá para desempatar la igualada en la segunda posición y mantener la persecución al líder. Waleska conoce la rivalidad existente y se apunta a jugar si su espalda se lo permite. Con ella, el Arxil tendrá más opciones.
Waleska Pérez (Caracas, Venezuela, 1994) no se conforma. Llegó desde su país para triunfar en el mundo del baloncesto y allá donde va, quiere que su equipo aspire a lo máximo. La escolta habla sobre el gran momento individual y colectivo. Sabe que se ha vuelto indispensable y no le pesa la responsabilidad. Tampoco para pronunciar la palabra «ascenso» aunque reconoce la dificultad de la gesta
– Lo primera es pregunta obligada: ¿cómo se encuentra en la ciudad?
– Me siento bien. Todo ha fluido como me esperaba. La adaptación está siendo muy buena. La ciudad es muy tranquila y me han acogido muy bien.
– ¿Qué hace una internacional por Venezuela en un equipo de Segunda División de España?
– Surgió la posibilidad de fichar por un equipo español porque con Venezuela tuve una preparación aquí. Eso me permitió ser vista por equipos de la zona.
– ¿Por qué se decidió por el Arxil y no por otro?
Era una buena opción para abrir puertas fuera de mi país. Me hablaron bien del Arxil. Sentí que este equipo iba a ser bueno para poder jugar y ser más vista.
– ¿No tuvo ofertas de Primera División?
– Es que no estuve tan interesada en fichar por un equipo de Primera porque en mi posición iba a tener más difícil jugar. Prefiero que sea así y empezar poco a poco. Al fin y al cabo, en Segunda se juega al mismo deporte que en Primera. Todo es baloncesto.
– Parece que ha encajado muy bien en el equipo.
– Tengo la facilidad de adaptarme adonde llegue. Juego al baloncesto desde pequeña y no tengo ese inconveniente de hacer cosas que a otras jugadoras no les gusten. Me adapto a todas las jugadores y creo que ellas también a mí. Eso me ha favorecido estos meses.
– Es la líder dentro del campo. Todas las demás miran hacia usted. Lleva el peso del equipo. ¿Cómo se consigue esa confianza del grupo?
– La confianza me la he ganado. Los primeros días, las chicas no confiaban tanto en mí. No sabían cómo era mi juego. Poco a poco me fui ganando su confianza y ellas la mía y las cosas han fluido bien por la forma de hablarnos dentro y fuera de la cancha. No tengo ninguna queja de ninguna porque desde el primer día el trato ha sido fantástico.
– ¿Qué expectativas tiene el Arxil este año?
– El resto de las chicas quieren ascender y yo les doy mi apoyo en todo lo que puedo si no tengo problemas físicos que me impiden jugar. Mientras mi salud está bien, les voy a dar todo lo que necesiten de mí.
– Cinco victorias y tan solo una derrota. Imagino que están mejor de lo que esperaban.
– Yo no estuve desde el principio con el equipo, pero creo que mis compañeras han trabajado para ello. Es merecido. El trabajo se traduce en victorias.
– ¿Dónde está el techo de este equipo?
– Creo que se puede superar el nivel actual. Este Arxil tiene mucho más que dar. Creo que sólo hemos ofrecido la mitad del rendimiento que podemos ofrecer. Si seguimos jugando como ante el Celta vamos a obtener más victorias sin sufrir.
– ¿Se empieza a hablar de play off en el vestuario?
– No. Vamos partido por partido. Estamos en la primera vuelta y queda muchísima temporada.
– Son una plantilla corta. ¿Podrán aguantar este ritmo?
– Eso sí que lo hemos hablado. Somos una plantilla muy corta y acumulamos muchos minutos. Esperamos completar la temporada a buen tono. No va a ser fácil porque cada partido está siendo más fuerte y hay que saber recuperarse.
«Estoy jugando bien, pero solo pienso en el Arxil»
Si mantiene el nivel, tendrá puertas abiertas para mejorar deportivamente. Waleska sabe que el Arxil le puede servir como trampolín, pero solo piensa en seguir dándolo todo por el conjunto verde. La escolta espera llegar al encuentro contra el Cortegada.
– Y ahora visitan el Cortegada. Le habrán hablado de la rivalidad existente.
– Sí, me han comentado que es un partido que se vive muy intensamente. Como el que jugamos el pasado fin de semana contra el Celta.
– Jugar partidos como estos es lo máximo en la liga.
– Me encantaría jugar el próximo partido, pero vamos a ver si puedo hacerlo. Sé que es un encuentro importante y me gustaría mucho poder aportar. Ojalá pueda participar y ayudar al equipo.
– ¿Sigue con sus problemas de espalda?
– Sí, aún no me he recuperado. El otro día contra el Celta forcé al seguir jugando.
– ¿Llegará al encuentro?
– Mentiría si dijese sí o no. Todavía no lo sé. Ojalá pueda estar porque es un encuentro muy importante y me gustaría poder ayudar a mis compañeras.
– Lo que está claro es que si sigue así, el Arxil corre el riesgo de perderla pronto.
– Bueno, no sabría qué decir. Yo juego para mi mejora personal pero me importa más que el equipo vaya bien. De momento no pienso en otra cosa que en ayudar. Estoy muy mentalizada en el Arxil y en aportar lo mejor de mí para conseguir victorias. En un futuro, ya se verá.
– Están contentos con usted en el club, ¿no?
– Sí, creo que estoy haciendo un buen trabajo y el club está contento conmigo.