El pasado jueves 24 de abril, el Pabellón Universitario de Pontevedra acogió un nuevo enfrentamiento entre los dos equipos cadetes del Club Baloncesto Arxil, el Cadete B y el Cadete A. Este tipo de duelos, más allá del resultado, representan una oportunidad para medir el crecimiento de las jugadoras y fortalecer el espíritu de club. En esta ocasión, el equipo Cadete A se impuso por 50-63, asegurando una victoria que las coloca matemáticamente como segundas clasificadas de esta fase.
Un partido con objetivos diferentes para cada equipo
El duelo comenzó con dos objetivos claramente diferenciados para cada equipo. Por un lado, el Cadete B, compuesto principalmente por jugadoras de primer año, buscaba sacar su mejor versión y demostrar que, a pesar de la diferencia de edad y de experiencia, podían competir de tú a tú contra sus compañeras del Cadete A. Además, tenían en mente la motivación de haber conseguido la victoria en el primer enfrentamiento entre ambos equipos.
Por otro lado, el Cadete A, formado por jugadoras de segundo año con mayor experiencia, encaraba el partido con la intención de evitar tropiezos y certificar su segunda posición en la clasificación de manera matemática.
Dominio del Cadete A en un partido sin sobresaltos
El encuentro transcurrió según el guión esperado, con el Cadete A mostrando su superioridad en cada uno de los cuartos. Aunque el partido estuvo igualado en algunos momentos, el equipo de segundo año logró imponerse en todos los parciales: 12-13, 16-19, 11-17 y 11-14. Este dominio refleja la capacidad del Cadete A para gestionar el ritmo del partido y mantener el control en los momentos clave.
A pesar de la derrota, el Cadete B dejó destellos de buen juego y demostró que, a pesar de ser un equipo más joven, está creciendo y adquiriendo experiencia para afrontar futuros retos. Las jugadoras de primer año ofrecieron momentos de gran intensidad y entrega, dejando claro su compromiso con el desarrollo y la mejora constante.
Un encuentro positivo para el club
Aunque no fue un partido que destacara por un despliegue brillante de baloncesto, sí fue un encuentro importante para el CB Arxil como club. Este tipo de enfrentamientos internos son clave para el desarrollo de las jugadoras, ya que les permiten competir en un contexto exigente y, al mismo tiempo, refuerzan los lazos de equipo en todas las categorías.
El Cadete A, con esta victoria, sigue consolidando su posición como uno de los equipos más sólidos de su categoría, mientras que el Cadete B continúa dando pasos hacia adelante, demostrando que el futuro del club está en buenas manos.
Mirando hacia el futuro
El derbi cadete del CB Arxil no solo dejó un marcador favorable para el Cadete A, sino que también puso de manifiesto el trabajo que el club realiza a nivel formativo. Ambos equipos, aunque en diferentes etapas de desarrollo, son reflejo del esfuerzo y la dedicación que la entidad pontevedresa pone en la formación de sus jugadoras.
Con cada partido, el CB Arxil sigue construyendo un proyecto sólido y prometedor, con la vista puesta en un futuro cargado de éxitos y grandes jugadoras. Este tipo de encuentros, además, son una oportunidad para que las jóvenes deportistas sigan creciendo tanto dentro como fuera de la cancha.
El club continuará avanzando con el objetivo de seguir formando no solo grandes jugadoras, sino también personas comprometidas con el deporte y con los valores del baloncesto.